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"Me encantó el paraje del embalse de Sobrón para recrear la aparición de un cadáver esqueletizado"


Un cadáver aparece en el embalse de Sobrón durante unas obras de dragado. Ese es el hecho que da inicio a la trama del libro 'Crisálida', del escritor Andrés Alonso Castillo (Miranda de Ebro, 8 de junio de 1965). San Martín de Don, en el Valle de Tobalina, y la ciudad de Frías son los dos enclaves de Las Merindades que tienen protagonismo en el libro. Y precisamente la localidad fredense será el escenario, este sábado, de un acto de presentación de la obra. Será a las 19.30 horas, en la sala Jaguar, junto al castillo. Posteriormente, se llevará a cabo la grabación de un programa sobre brujería a cargo del equipo de 'El Prisma de la Razón', de Radio Espinosa Merindades. Andrés Alonso Castillo hace un pequeño repaso de su obra para Merindades Hoy.

-¿Qué puede esperar el lector de 'Crisálida'?

Una novela rápida y de fácil lectura que intenta enganchar al lector desde el inicio. Por eso empieza por el final: el descubrimiento de un cadáver en el embarcadero de San Martín de Don. La narrativa es la mínima y necesaria para cimentar los diálogos y los sucesivos escenarios por donde pasará la novela, dejando el protagonismo a los diálogos y la acción. Sin embardo, detrás de esa lectura fácil, se esconde un gran esfuerzo de documentación gracias a reuniones mantenidas con psiquiatras, médicos, Policía Nacional y Guardia Civil.

-¿Cuál ha sido la acogida inicial del libro?

El 28 de septiembre se presentó en Miranda y la acogida ha sido fenomenal. La novela acaba de estar presente en la Feria Internacional del Libro de Frankfurt y ha llegado a estar en el puesto 16 en bajadas en Amazon en novelas de su categoría.

-¿Qué escenarios de Las Merindades aparecen en el libro? 

Frías y el embarcadero de San Martín de Don.

-¿Por qué eligió Las Merindades para centrar parte de la trama?

Me encantó el paraje del embalse de Sobrón para recrear la aparición de un cadáver esqueletizado. A ello hay que unir el encanto de la ciudad medieval de Frías y su festival de Terrorifrías.

-Licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad de Valladolid y en la actualidad socio de un despacho de asesoría de empresas, ¿qué le llevó a escribir? 

Desde niño, siempre sentí una atracción especial hacia la literatura, que colmé escribiendo obras de teatro y musicales. Tras mis años de formación universitaria y con el nacimiento de mis hijos, sentí la irrefrenable pasión por escribir. Fue entonces cuando percibí que escribir era algo necesario en mí para encauzar todo aquello que sentía. Escribí "Los ángeles del mar" como homenaje a los enfermos de alzheimer y a sus cuidadores. Al año siguiente me publicaron mi segunda novela, "El legado de Sophie", una novela de aventuras de dos arqueólogos inglesas que encuentran unos papiros datados en el reinado de Ramsés II en al Antiguo Egipto. Y ahora he publicado "Crisálida", un psicothriller que siempre he querido escribir.

-¿A qué le roba tiempo para poder escribir? 

Mi trabajo de socio en un despacho de asesoría de empresas de Miranda me deja poco espacio para ello, pero me he acostumbrado a robarle tiempo al día y a encontrar resquicios de tiempo para poder escribir. Con esfuerzo, método y disciplina se pueden compatibilizar ambas actividades. Evidentemente, he debido hacerlo en mi tiempo libre, lo cual, vistos los resultados, ha merecido la pena.

-¿Cuál ha sido su evolución como escritor desde 'Los Ángeles del Mar' hasta ahora?

Mucha porque me he formado a mí mismo. Aprendo por cada palabra que escribo, por cada crítica que escucho de mis lectores y por todos los consejos que he recibido del mundo literario y editorial. Hoy soy más completo como escritor que hace cuatro años. No quiero encasillarme en un género, sino escribir aquello que me emociona. Yo siempre digo que si no me emociono yo mismo al escribir no puedo pretender que el lector se emocione con mis novelas.

-Lo que sí parece que ahora con 'Crisálida' ha virado su obra hacia la novela de misterio. ¿Es así?

He virado con esta novela, pero ello no quiere decir que continúe escribiendo sobre este género. De hecho, tengo novelas escritas de otros géneros que están pendientes de ver la luz.

-¿Ve factible poder dedicarse a la escritura profesionalmente?

Soy realista. Hoy por hoy, no. El mundo editorial es muy difícil y está muy cerrado. Para poder vivir de ello hay que tener una trayectoria muy amplia, ser famoso o gozar de una calidad muy sobresaliente. De momento, me conformo con que las editoriales se hagan cargo de todos los gastos de publicación y distribución tanto nacional como a otros mercados y percibir mis derechos de autor a cambio de cederles la explotación de mis novelas.

-¿Cuáles son sus próximos proyectos?

Ahora mismo estoy ocupado de lleno con "Crisálida". El 17 presento en Frías. En diciembre tengo negociadas presentaciones en Quinta Martín Galíndez y en Vitoria, además de lo que pueda ir surgiendo. Tengo varias novelas escritas que están pendientes de publicación. El mercado y las editorial irán marcando el camino a seguir.

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